La ingeniería de diseño es fundamental para que las empresas de desarrollo de productos tengan éxito. El objetivo del desarrollo del diseño es imaginar y acordar una solución de producto que beneficie tanto a los clientes como al negocio. El desarrollo del diseño se ve limitado por el presupuesto, la capacidad de ingeniería y el tiempo de puesta en el mercado. El proceso de ingeniería de diseño es iterativo y cíclico, con ideas que pasan por múltiples rondas de prototipos, pruebas, evaluación y revisión hasta que el diseño final se considera lo suficientemente óptimo y confiable para la producción. El proceso de ingeniería de diseño comienza definiendo el problema y luego haciendo una lluvia de ideas con posibles soluciones antes de crear prototipos, probarlos, recopilar comentarios y evaluar si la definición del problema se puede refinar aún más, y si se deben rechazar o aceptar las soluciones propuestas, o si las soluciones se pueden mejorar con otro ciclo de desarrollo.